Estuve por unos minutos cerca de él y no se imaginan las enormes ganas que tenía de abrazarlo y decirle cuánto lo sentía todo lo que había pasado; que lo he extrañado a morir, que lo quiero mucho y que siempre a pesar de todo, aunque suene cursi, pero siempre lo querré. Ese aprecio no morirá.
Y es lo que pasa conmigo... Media vez agarro cariño, ya nadie me puede parar. No se termina.
Si tan solo supiera él cuánto lo extraño y que lamento tanto mis errores, pero que quisiera también que él me dijera lo mismo: que me extraña, que me quiere y que olvidemos el pasado.
He ingeniado un montón de ideas para llegar donde él y decírselo que ya no puedo más seguir con esta situación. Así, sin hablarnos. Ya no. Ya no puedo más. De verdad, creanme, lo extraño.
Y lo extraño es que nuestra amistad fue tan rápida, que pronto le tome cariño y se volvió como un amigo de años. Inclusive mi madre le tomo mucho cariño y aún se lo tiene y me reprocha mis actitudes para con él y me revuelve la conciencia haciéndome pensar de cuando lo ignore.
Solo por eso quisiera regresar el tiempo y rectificar lo hecho.
Un día como hoy, es cuando he reprimido tanto mis sentimientos como nunca.
Y quiero volverle a hablar y que las cosas sean igual... Pero sé que quizás ya no hay oportunidades. TE EXTRAÑO (...) !!!
Quisiera plasmar tu nombre aquí y que de una vez sepas esta verdad, pero hay un pero que me detiene y aún no lo descifro.
Quiero creer en la magia y que de repente mañana nos riamos otra vez como solíamos matarnos del chiste.
Bueno... Seguiría escribiendo pero es hora de cenar.
Todo tiene su razón de ser... Las cosas fluyen como quieran que fluyan... Para bien. Así que quizás esta hora de cena, me quiere decir que le dé pausa a esto y luego continuar.
Jaja, un día como hoy, la privación de un grito de un TE QUIERO fue inaudito.
